Día Internacional de la alfabetización

Tomar lápiz y papel para escribir nombres, fechas importantes y plasmar una firma, leer un instructivo, receta médica, los letreros de las comercios y camiones son actividades muy comunes para muchas personas, pero para quienes durante décadas no tuvieron ese privilegio, significa un gran logro y alegría.

 

Es el caso de los 87 mil 802 jóvenes y adultos oaxaqueños que de 2011 a 2015 superaron el analfabetismo y aprendieron a realizar cuentas, con los servicios educativos que brinda el Instituto Estatal de Educación para Adultos (IEEA).

 

Desde el primer día que tomaron la decisión de no depender de nadie para conocer el contenido de los documentos importantes, se esmeraron y organizaron su tiempo y actividades para aprender a leer y escribir. Levantarse más temprano, estudiar por las mañanas, tardes, noches o fines de semana tiene su recompensa cuando se logra el objetivo.

 

Los rostros se iluminan cuando con orgullo las mujeres y hombres dicen “ya puedo leer, escribir y nada me va a detener voy a seguir estudiando”, es la mayor satisfacción para ellos y sus familias.

 

Y aun cuando la educación es un derecho universal, plasmado en el artículo tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, debido a la dispersión geográfica de la población, costumbres o falta de recursos económicos, el analfabetismo sigue siendo una de las problemáticas a resolver, pues está acompañado de desigualdades, pobreza y desempleo.

 

En los 570 municipios el IEEA realiza una intensa labor de incorporación y atención educativa, acorde a los intereses y necesidades de cada persona, adaptándose a los tiempos disponibles para aprender, porque la mayoría de los adultos tienen actividades laborales, familiares y comunitarias que cumplir.

 

El Director General del IEEA, José Manuel Bermúdez Hernández, se ha dado a la tarea de intensificar las acciones de combate al analfabetismo y rezago educativo, con infraestructura y personal capacitado, se brindan los servicios de alfabetización, primaria y secundaria, en cada una de las localidades del estado.

 

El Gobierno Estatal y Federal tienen el interés de que la población oaxaqueña disminuya los índices de rezago en que se encuentra, conjuntando esfuerzos con los programas gubernamentales y la sociedad, cada día más adultos aprenden a leer y escribir.

 

“Constituye una ardua labor, que lleva implícito un compromiso por brindar la oportunidad de estudio a todos aquellos adultos que por diversas razones estuvieron privados en su momento del derecho a la educación. En esta tarea el INEA y el IEEA trabajan con el mismo objetivo: abatir los índices de rezago educativo en el país, con énfasis en nuestro estado de Oaxaca”, expresó el Director.

 

De los 78 millones 423 mil 336 mexicanos y mexicanas mayores de 15 años, 5 millones 393 mil 665 no saben leer ni escribir, por lo cual en Gobierno Federal a través del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), el año pasado puso en marcha la Campaña Nacional de Alfabetización y Abatimiento del Rezago Educativo 2014-2018, con el objetivo de que 2.2 millones de adultos aprendan a leer y escribir, 2.2 millones terminen la educación primaria y 3.1millones la secundaria.

 

Con esta campaña que incluye una movilización social, conjuntando esfuerzos entre cámaras empresariales, instituciones públicas y privadas, grupos de voluntarios y medios de comunicación, se logró que 370 mil 299 mexicanos abandonaran las filas del analfabetismo: 184 mil 351 en el año 2014 y 185 mil 948 de enero a agosto de 2015.

 

Del año 2011 y al mes de agosto de 2015, 87 mil 802 oaxaqueños aprendieron a leer, escribir y realizar cuentas básicas, disminuyendo de manera significativa la población analfabeta que según el Censo de Población y Vivienda 2010 era de 421 mil 810 personas.

 

Los resultados son visibles pero también implica redoblar esfuerzos para no solo atender a los 34 mil 347 educandos que cursan el nivel de alfabetización y el inicial, más 118 mil 389 de primaria y secundaria, distribuidos en todo el estado, sino integrar a más personas a que mediante la adquisición de conocimientos mejoren su vida familiar, laboral y social.