Guelaguetza y libertad de expresión

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La Guelaguetza tiene temas vastos. Culturales, económicos, sociales y políticos. Es fiesta que se reproduce en todo Oaxaca, se ha extendido, los maximalistas dirían que ha colonizado pueblos y municipios.

 

Ya la hacen en Zaachila, Etla, Zimatlán, San Antonino Castillo Velasco, Mitla, Cuilapam de Guerrero, Capulálpam de Méndez, San Jacinto Amilpas, Santa Lucía Ocotlán, hay una Guelaguetza Costeña que realizan en febrero en Jamiltepec… Hasta buscan sus propios lunes como el pueblo de Yaxe que lo realiza el lunes siguiente del Segundo Lunes del Cerro de Oaxaca.

 

Incluso, se prolonga a otras latitudes, cuando en Oaxaca se realiza el Segundo Lunes del Cerro, en la Villa de Guadalupe de la Ciudad de México grupos de oaxaqueños ataviados con sus ropas típicas entregan ahí sus regalos cual Guelaguetza.

 

No falta en las recepciones de convencionistas, turistas o políticos. En el extranjero hay grupos consolidados, como en Los Ángeles donde la colonia oaxaqueña es grande. Instituciones educativas y Casas de Cultura tienen sus grupos folclóricos con su Guelaguetza que llevan al extranjero.

 

La influencia de los Lunes del Cerro es directa sobre esas fiestas, al ser Guelaguetza insignia no debe seguir al garete. Urge hacer un rediseño general de la del Cerro del Fortín, no sólo por esta cuestión cultural sino también por su importancia económica.

 

No hace falta abundar a este respecto, un estado con nulo desarrollo industrial y agrícola como el nuestro, pero con un patrimonio natural, cultural y edificado, puede ayudarse mucho con buen aprovechamiento turístico de esas riquezas. De ahí la urgencia de mejorar la Guelaguetza, de retomar la disciplina y pulcritud de sus creadores hace 85 años.

 

Al escribir estas líneas, a media Guelaguetza 2017, aún faltaban los resultados totales, por eso en este número nos referimos a las fiestas anteriores, sobre todo a la de 2016. La foto de portada corresponde a la delegación de Juchitán que desde ese año mostraba su acentuada crisis.

 

¿Diputados en cruzada por los periodistas?

 

Otro de los grandes temas de los últimos días en Oaxaca, es de nuevo la ominosa demagogia diputadil, dizque en defensa de la libertad de expresión y de los periodistas, ahora por parte de la 63 Legislatura en el marco de la elección federal ya en marcha.

 

Como las anteriores, los miembros de esta desprestigiada legislatura se solazan manoseando el tema. Ninguna antes logró legislar nada al respecto, ni falta hace, lo que hace falta es que se cumplan las leyes ya vigentes y cese la impunidad; más leyes que no se van a aplicar, ¿para qué?

 

¿Alguien en su sano juicio puede creer que actores de la talla mafiosa de Samuel Gurrión, María de la Nieves, Iván Mendoza, Carol Altamirano, Juan Bautista y el bisoño Irineo Molina harán algo por quienes ven como sus críticos a someter? Quien no los conozca, que pierda su tiempo con ellos.