Los negocios chuecos del cronista

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La empresa Construcciones Villa De Antequera S.A. De C.V. (Covasa) propiedad del flamante cronista de la Ciudad de Oaxaca, ingeniero topógrafo Jorge Alberto Bueno Sánchez, de acuerdo a denuncias y testimonios, fue beneficiada de manera directa con el mal manejo de la adjudicación de obras y recursos en el sexenio de Ulises Ruiz Ortiz. 

 

Beneficiada sobre todo en la construcción de hospitales por parte de la Secretaría de Salud. Constructor consentido era Bueno Sánchez del ex secretario de Salud Martín Vásquez Villanueva. Este último, a pesar de haber sido hallado responsable de desvíos millonarios, también sigue impune.

 

Al calor de la disputa por el gobierno de Oaxaca en 2010, menudearon las acusaciones del equipo de Gabino Cué contra Eviel Pérez Magaña, hombre fuerte del gobernador saliente. Éste era acusado de que a su paso por la Secretaría de Obras Públicas de ese sexenio favoreció de manera directa a ciertas empresas constructoras.

 

Eran seis empresas que tenían la misma dirección fiscal, mismas que cuando no podían ser más favorecidas con la adjudicación directa de obras, Obras Públicas usaba una empresa subcontratista para seguirlas beneficiando. Esto fue señalado en conferencia de prensa por Bernardo Vásquez Colmenares, entonces vocero del candidato Cué.

 

Pruebas contra COVASA

 

El vocero mostró facturas de la Constructora Villa de Antequera (COVASA), número 2315, para la construcción del hospital de 30 camas de Putla Villa de Guerrero, en la que se subcontrató a Davizao, Oaxes, Nexicho y Peom Construcciones.

 

La nota del diario Noticias del 24 de junio de 2010 consignó que “De acuerdo a la factura 0101, COVASA pagó un millón 112 mil 602 pesos a la empresa Davizao Construcciones por concepto de estructura y colocación de aire acondicionado en el hospital; a Oaxes, en la factura número 0219, le paga 886 mil 071 pesos por concepto de mano de obra para la colocación de equipo eléctrico en la misma; a Nexicho le paga, factura número 0213, 152 mil 684 pesos por concepto de cimentación y otros trabajos del mismo y a Peom Construcciones le paga, factura 0061, un millón 56 mil 606 pesos también por concepto de cimentación del hospital.

 

“Es decir, COVASA, de los mismos recursos públicos, le paga a estas cuatro empresas diversos trabajos, todo en la construcción de un hospital de 30 camas, asignada formalmente a Constructora Villa de Antequera, pero que terminó siendo ejecutada por este grupo de empresas que operan la corrupción rampante en la secretaría de Obras Públicas”, acusó el vocero de la entonces alianza de partidos que postulaba a Cué.

 

También “obras fantasmas”

 

También denunciaron “obras fantasmas”, obras que no existían físicamente pero sí en los expedientes de pagos como el hospital general de 30 camas de Santo Domingo Barrio Alto. Esta “obra fantasma” incluso fue incluida en el último informe de gobierno del Ulises Ruiz. Vásquez Colmenares mostró fotografías de un terreno baldío donde supuestamente debería estar construido el hospital.

 

“La obra, supuestamente la realizó la empresa Grupo Empresarial Oaxes S.A de C.V, en el contrato SSO-DIMSG-LPN-PEF-003/09, por un monto de 35 millones 621 mil 828 pesos, representada por Montes Serra, pero nunca se hizo.

 

“Además se exhibió copia de la factura número 0183, de fecha 29 de julio del 2009, de la empresa Oaxes, en el que recibe de los Servicios de Salud de Oaxaca un anticipo por la obra del 30 por ciento, es decir 10 millones 686 mil 548 pesos”. http://old.nvinoticias.com/principal/favorecio-obras-publicas-6-empresas
COVASA orquesta de la repartición

 

Era pues COVASA de Bueno Sánchez empresa orquesta y también beneficiada de la repartición de los recursos públicos a otras empresas que sin licitación acapararon los millonarios recursos de Obras Públicas y de la Secretaría de Salud en el sexenio de Ulises Ruiz.

 

Pero no sólo incursionó con “éxito” nuestro personaje con COVASA para la obtención de obras públicas, a él se le encargaron culminar las obras que dejó tiradas la empresa Gurrión del sexenio anterior; se le entregaron obras en el Centro Histórico; además de otros negocios pingües con sus otras empresas constructoras, su afianzadora, su comercializadora.

 

La sagacidad del personaje está fuera de toda duda, si fue capaz de eludir estas acusaciones y convertirse también en constructor consentido del nuevo gobierno, el de Cué, cuyo equipo lo había denunciado meses antes, obtener el título de cronista fue peccata minuta. Eso es lo que premió el llamado H. Ayuntamiento de Oaxaca.