Venían por su “cambio”

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Ha tenido que pasar todo este tiempo para que lo que se veía venir desde la campaña política de Gabino Cué por el gobierno de Oaxaca llegara a su clímax: que sólo buscaban la alternancia pero no una transición hacia la democracia y transparencia. Prueba de ello es que no les importó culminar el proceso legislativo de plebiscito y el referéndum, que no se reglamentó. 

 

La revocación de mandato quedó en una simple estratagema pues la ley gabinista exige que la firmen 20 por ciento del electorado, “700 mil oaxaqueños. Una tarea que además, se tendría que realizar sin los recursos y la infraestructura para una campaña política; por si fuera poco, tal solicitud se tendría que realizar una vez transcurridos tres años de ejercicio. Esto es, si en 2006 hubiese existido ya la figura constitucional que se estableció en abril de 2011, Ulises Ruiz no hubiera tenido mayor problema legal para mantenerse en el cargo”. http://www.revistaenmarcha.com.mx/miscelanea/analisis/702-oaxaca-abril-2011-reforma-constitucional-oportunidad-perdida.html

 

Peor de lo mismo

 

El ex priista Gabino Cué Monteagudo que fue expulsado del Palacio de Gobierno y prácticamente del PRI por José Murat Casab en los primeros meses de sexenio de éste, llegó finalmente al gobierno de Oaxaca por una coalición opositora conformada por PRD-PAN-PT y Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano). Después de una primera incursión como candidato, cuando perdió ante Ulises Ruiz Ortiz en 2004. Dos años después se hizo senador.
Gabino fue en 1998 una posición que dejara Diódoro Carrasco como Secretario de Gobernación, en el entonces novel gabinete de José Murat.

 

Bulmaro lo corrió

 

Sin embargo, cuentan que Bulmario Rito Salinas le sacó las cosas a Gabino de su oficina de secretario técnico “como a las criadas”, con lo cual ya no tuvo otra que marcharse. Hoy Rito es el único ex muratista y ex ulisista preso que no gozó de impunidad como todos los demás, ¿algo de eso habrá influido también?

 

Así, el joven que fue elevado por Diódoro Carrasco en su sexenio, para lo cual éste hizo que el congreso reformara la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo y hacer de la auxiliar secretaría técnica del ejecutivo una secretaría de gobierno para dársela a Gabino, saltó a la oposición y de pronto se descubrió hasta de izquierda, aunque con un discurso muy débil. No obstante, la carencia de figuras con liderazgo en la oposición, así como su manejo de imagen, lo colocó como el providencial para sacar al PRI del palacio de gobierno.

 

Alianza o pacto de complicidades

 

Desde su campaña en 2010 se veía el objetivo de hacerse del poder a cualquier costo, de ahí que se aliara con tirios y troyanos, PRD y PAN; con Murat y la jerarquía local de la iglesia católica; con Flavio Sosa y el Chucky Franco; con los de la APPO y con los desplazados del PRI. En una entrevista del entonces candidato Cué con En Marcha —eran los últimos días de aquella exitosa campaña—, cuando le preguntamos si tenía alianzas con los ex gobernadores, sobre todo con el poco prestigiado José Murat, se encogió de hombros con una sonrisa para decir que él aceptaba a todos los que le ayudaran, “no tengo que pelearme con nadie”, dijo.

 

Al ganar e iniciar su gobierno, de inmediato inició también a contradecir su discurso de campaña, en vez de llamar a cuentas a los saqueadores del pasado, como fue su compromiso y exigencia de la sociedad, hasta dio cabida en el gabinete del “cambio” a connotados ulisistas como Andrés Webster Henestrosa que siguió en el cargo que tenía en el sexenio anterior, Secretario de Cultura. El conspicuo priista-muratista Germán Espinosa fue instalado en la dirección del Colegio de Bachilleres de Oaxaca (COBAO) que se convirtió en bunker político muratista torciendo más su condición académica. Estefan Garfias, ex precandidato priista a gobernador, fue incluido en la Secretaría de Transportes, etc. La festinada alianza, está muy claro, fue más un pacto de complicidades.

 

Lo más atrevido fue sostener la mal llamada velaria sobre el Audiorio Guelaguetza en el Cerro del Fortín, no sólo se desobedeció la repulsa popular a ese adefesio, sino se le gastó más dinero del erario de manera desordenada. La aparatosa lona se vino al suelo, pero ahí la tienen cual nítida imagen del actual gobierno.

 

Las mentiras: “Fondo Oaxaca”

 

Las nuevas mentiras de hoy también son muy notorias: el “Fondo Oaxaca” y la construcción de las carreteras a Istmo y Costa. En estas últimas nada tiene que ver el gobierno del estado, son totalmente inversión federal pero este gobierno las presume como suyas después del Cuarto Informe. El “Fondo Oaxaca” no existe en los hechos, sólo es propaganda con que presumen apoyar a los pequeños empresarios del centro histórico, afectados por los aliados del gobierno, los maestros de la S22, lo que ha sido denunciado recientemente por dirigentes de ese sector.

 

En Marcha lo reveló desde agosto de 2011. No son recursos de Oaxaca sino del Fondo PyME, programa federal que por si fuera poco inició acá con seis meses de retraso. En noviembre de 2012 de nuevo retomamos este tema: “Quienes otorgan los créditos finalmente son los bancos… No existe un plan que busque reactivar la economía en Oaxaca, el (inexistente) ´Fondo Oaxaca´ que en convenio con el Gobierno Federal aplica el fondo de garantía PyME para otorgar préstamos a los microempresarios no es la solución a la grave crisis económica oaxaqueña”. http://www.revistaenmarcha.com.mx/miscelanea/analisis/1171-en-el-abandono-micro-pequena-y-mediana-empresas-en-oaxaca-.html y http://www.revistaenmarcha.com.mx/reportaje/807-fondo-oaxaca-del-gobierno-defrauda-a-microempresarios.html