Los resultados electorales del pasado 5 de julio no fueron ninguna sorpresa en Oaxaca, incluso en el 谩mbito nacional sucedi贸 lo que ya se esperaba. Diversas encuestas anunciaban lo que a la postre fueron los resultados: el crecimiento electoral del PRI, la ca铆da del PAN y el derrumbe del PRD.
Algo sorpresivo fue el posicionamiento del Verde (06.50% ) 聽y del porcentaje del voto nulo, que se coloc贸 apenas un punto porcentual abajo del primero (05.39%). A despecho de sus detractores, creci贸 el voto nulo como聽 opci贸n para quienes desearon manifestar su hartazgo de la clase pol铆tica y sus exigencias para un mejor proceso electoral y una vida pol铆tica menos arbitraria y desaseada en manos de una partidocracia.
Este voto nulo que se incremento notoriamente y el alto abstencionismo deber谩 ser atendido por la legislatura que viene con las reformas que se demandan. (Este fen贸meno es analizado en la revista En Marcha que este fin de semana inici贸 su circulaci贸n).
El PRI con su aliado el partido verde avanz贸 a m谩s de la mitad de las curules de diputados en su posesi贸n, en franca mayor铆a. La guerra sucia ahora no le funcion贸 al PAN, quiz谩 porque no hab铆a solo un 鈥渧illano鈥 al frente que enlodar. Por el contrario, los priistas que no cayeron en la provocaci贸n, ni en Oaxaca, capitalizaron esta guerra de lodo a su favor. Ellos que no son precisamente un dechado de limpieza aprovecharon, sin embargo, esta agresiva campa帽a.
Claro, todas estas ventajas sostenidas con una gran estructura y capacidad de gasto, generalmente proveniente del erario. Los se帽alamientos de que municipios y dependencias estatales le entraron con el dinero p煤blico a la compra del voto no es nada remoto. De nuevo la posesi贸n del poder fue de gran ilegal ventaja, donde los partidos lo tienen, el caso Oaxaca y el caso DF. En este 煤ltimo el gobierno realiza maniobras similares a los que hace el gobierno del primero.
El PAN con sus recursos federales y delegaciones estatales no se queda atr谩s. Los grandes recursos gastados en una propaganda que buscaba aprovechar la solitaria popularidad del presidente Calder贸n y su combate al narcotr谩fico no alcanzaron a beneficiar a sus candidatos. Hacer del combate al narcotr谩fico y la desordenada salida del ej茅rcito mexicano de sus cuarteles para laborar de polic铆as no fue suficiente para distraer a la poblaci贸n de la m谩s grande crisis econ贸mica de M茅xico de los 煤ltimos tiempos.
Por ello, el castigo que recibi贸 el partido del presidente no es m谩s que l贸gico y natural, la p茅rdida de empleos y la ca铆da de la econom铆a que en c谩lculos m谩s reales se espera hasta del 10 por ciento para fin de a帽o, no dejan posibilidad de distraer a una poblaci贸n lacerada por la crisis.
La err谩tica pol铆tica ante la epidemia de influenza que destroz贸 la econom铆a de regiones enteras, en Oaxaca acab贸 por desplomar su actividad tur铆stica, a la que se quiso presentar como un 茅xito presidencial, fue sin duda contraproducente. Ni siquiera necesitaron los otros partidos contrastar el terrible e indetenible crecimiento del desempleo con la oferta del 鈥淧residente del empleo鈥, que hoy se antoja un fraude.
No cabe duda que estar en la oposici贸n es una gran ventaja, lo que hace un tiempo reconoci贸 Felipe Calder贸n ante el ex presidente Ernesto Zedillo. Sin embargo, no imagin贸 tal vez el grado de debilidad a que llegar铆a en ese poder que se le esfuma: igual que el PRI en sus peores tiempos, hace tres a帽os cuando tuvo tan s贸lo 106聽 diputados y se ubic贸 como tercera fuerza, ahora el PAN a煤n siendo la segunda fuerza apenas logr贸 poco m谩s 140 diputados.
Por haber basado Germ谩n Mart铆nez C谩zares esta campa帽a en la figura del presidente Calder贸n, sin duda con anuencia o instrucciones del mismo presidente, la espectacular derrota del PAN es tambi茅n una derrota del presidente; renuncia el pendenciero Germ谩n, es el 鈥渃hivo expiatorio鈥, pero deja un partido descompuesto, en crisis, y sobre todo un presidente d茅bil a merced de un Congreso adverso, desde donde el PRI podr谩 m谩s que co-gobernar como lo ven铆a haciendo.
Qui茅n esperaba que Manuel Espino, ex presidente del PAN, m谩s vinculado a los b谩rbaros del norte, sea ahora quien llame a la congruencia a su partido, a volver a sus bases doctrinarias, dice: 鈥淟o importante no es lamentarnos, quejarnos, enojarnos por perder curules, gubernaturas y alcald铆as, sino por perder identidad, principios, congruencia鈥. Y esto dedicado a quienes se hicieron llamar doctrinarios del partido, quienes habr铆an de recuperar ese legado, como el de Carlos Castillo Peraza, con quien Calder贸n estuviera vinculado. Sin embargo, desde el 2006 han hecho de la guerra sucia su principal estrategia. Pensaron que con esto ya ten铆an para siempre el secreto del 茅xito, ahora no acertaron. Sin duda se avecinan tiempos de discusi贸n y disputa por la posesi贸n del PAN, donde aquellos que llegaron con Vicente Fox est谩n a la expectativa.
Pero como el PRI ya tiene m谩s gubernaturas en su haber, incluso con la recuperaci贸n ahora de otras que ya eran basti贸n panista, su fuerza econ贸mica y pol铆tica crece. Su capacidad de cooptaci贸n y manejo de los dirigentes estatales como ha sucedido en Oaxaca se acrecienta. Moreno Alc谩ntara, del聽 panismo oaxaque帽o, el famoso 鈥淟ibret贸n鈥 (por aquello que le entran hasta los centavos) ha declarado que el no renuncia como C谩zares. Un amigo del priismo, panista at铆pico rechazado por el panismo local, el ex priista Guillermo Zavaleta ya es diputado federal plurinominal. La derrota les pega por todas partes, puesto que desde cuando ya tienen enemigos en casa.
La debacle del PRD es estridente, ni quien parec铆a candidato de lujo en Oaxaca (aqu铆 siempre sostuvimos lo contrario) el ex rector de la UABJO, el partido pudo siquiera sostener la cauda de votos obtenidos en las elecciones pasadas de diputados locales. Con un territorio m谩s amplio en estas elecciones federales, el contador Mart铆nez Neri obtuvo menos votos que el abanderado en las locales, V铆ctor Amado L贸pez, cuyo distrito local fue m谩s reducido. La ca铆da del PRD estatal y nacional es un asunto aparte y m谩s grave, con mayores conflictos y con poderosos enemigos en su disputa: L贸pez Obrador y las tribus de los 鈥淐huchos鈥.