Cuauhtémoc Blas
Grupos de la izquierda histórica lograron crear el PRD en 1989, con los de la Corriente Crítica del PRI. Su primer presidente fue Cuauhtémoc Cárdenas. Hubo de todo, comunistas, universitarios y de otros partidos que se fusionaron como el PSUM y el PMT de Heberto Castillo.
Fue amplio el crecimiento del PRD con Andrés Manuel López Obrador como su presidente (1996-1999), cuando logra sus primeras grandes victorias, como la de la Ciudad de México en 1997, con Cárdenas. También la gubernatura de Zacatecas, con Ricardo Monreal. La eficacia y talento político de López Obrador se mostraban desde entonces, con sus eficientes “Brigadas del sol” en el trabajo proselitista.
Después del segundo descalabro de López Obrador en las elecciones presidenciales de 2012, el PRD fue copado por el llamado grupo de los “Chuchos”, con Jesús Ortega y Jesús Zambrano, quienes pronto entrarían al denominado “Pacto por México”, con el cual avalaron las Reformas Estructurales del Presidente Peña Nieto. Que en los hechos significó la venta de las riquezas nacionales, PEMEX, CFE, a firmas extranjeras.
López Obrador necesitaba su propio partido, librarse de las innumerables corrientes perredistas, pero sobre todo de los Chuchos, quienes cooptados como estaban, no permitirían que el PRD lo lanzara de nuevo para presidente.
Con Morena el hoy presidente atrajo a los mejores cuadros del PRD, dejándolo en los huesos. Un cascarón con el único rumbo de su desaparición. Ya sin la fuerza de las masas y de los grupos políticos hoy en Morena, los Chuchos muestran sus reales capacidades. Cambian la ideología de su partido de la noche a la mañana, sin consultar a sus escasas bases. De ser de Izquierda se declaran socialdemócratas.
De un plumazo cambian de chaqueta, pero también de un plumazo se desfondan por completo. Los pocos grupos que le quedaban no aceptan ser socialdemócratas, ni seguir atados a los vaivenes e intereses personales de los Chuchos que solo buscar seguir haciendo rentable ese fantasmal partido.
Guichicovi: espejo de la agonía del PRD
Un espejo donde poder mirar esa agonía del PRD es San Juan Guichicovi, municipio de la Zona Norte del Istmo de Tehuantepec, que durante casi tres lustros se ha sostenido como principal e inamovible bastión perredista. Incluso, el PRD local resistió los embates obradoristas de 2018 y 2021, en los que candidatos de ese partido lograron ganar la presidencia municipal.
El iniciador de este movimiento político sui generis, Raynel Ramírez Mijangos, presidente municipal saliente de San Juan Guichicovi nos declaró, luego de su tercer informe de gobierno municipal, que ante la realidad estatal y nacional del PRD están obligados a buscar opciones. “Seguimos en el PRD —dijo— pero también estamos viendo hacia dónde vamos a caminar, vemos si todavía hay futuro dentro del partido. Pero veo que las cosas no están tan bien, en cada elección que pasa vemos que el PRD se va hundiendo y hundiendo”.
¿De repente se pueden quedar sin registro para su trabajo político, la realidad los está empujando?, se le inquirió. “No nos queda de otra, por eso tenemos que ver, buscar opciones, no queda de otra. Desde cuánto tiempo hemos sostenido al partido acá en el poder, incluso resistimos los tsunamis de López Obrador en 2028 y 2021. Pero tenemos que buscar opciones para seguir trabajando en bien de nuestras comunidades”.
En torno al trabajo político del equipo que dirige desde hace casi 15 años en la Villa de San Juan Guichicovi, el secreto para sostener la presidencia tantos años estriba, dijo, en “tener la confianza de las autoridades auxiliares, el apoyo de las 46 agencias municipales. Así, dejamos un municipio tranquilo, trabajando en paz. No hay una sola comunidad donde no hayamos realizado obras. De tal manera que, al darle solución a los problemas de nuestros pueblos, estamos tranquilos, sin protestas, sin bloqueos. Tener los pies firmes sobre la tierra, no olvidar que por la gente estamos en el Ayuntamiento, y atender a nuestras comunidades, nos sostiene al frente”.
www.revistaenmarcha.com.mx, lc.blas@gmail.com y @blaslc