Zenzontepec, Loxicha y Huatulco

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¿Cómo ocuparse de los 570 municipio de Oaxaca?, harían falta casi dos años, de escribir a diario, y centenas de periodistas. Pero quizá, como en las estadísticas, con una muestra podamos tener una idea de lo que en ellos acontece. Acá hablamos hoy de tres.

58 municipios de Oaxaca se encuentran entre los 125 más pobres de México. Entre ellos Santa Cruz Zenzontepec y San Agustín Loxicha. Los dos indígenas y con muy bajos ingresos.

En Zenzontepec se realizan por primera vez obras sin precedentes. El actual Ayuntamiento dirigido por Antonio Merino Mejía y su cuerpo edilicio, decidieron trabajar intensamente, hasta lograr este récord social: más de una obra en cada una de las 24 agencias municipales, además de la cabecera municipal. Fueron 51 obras realizadas en 2008.

Acá no sólo cumplieron con su trabajo, como deberían hacer todos los ediles, sino se dieron a la tarea de conseguir mayores recursos, en un esfuerzo de gestión que les redituó 15 millones de pesos adicionales. Y para el año que viene, afirman, han gestionado más de 80 millones de pesos adicionales a los que recibe por los fondos federales, que son de 51 millones de pesos.

Todo lo contrario sucede en otro municipio de extrema pobreza, San Agustín Loxicha, donde en 2008 su Ayuntamiento recibiera 104 millones de pesos en total y no puede ofrecer un catálogo de obras, como el primer municipio, sino al contrario, como puede verse en el número reciente de la revista “En Marcha”. Dispendio y frivolidad de la autoridad municipal en el municipio que ocupa el tercer lugar en pobreza en la entidad: San Agustín Loxicha.

A los 54 millones recibidos por los fondos federales en 2008, por ser de los 125 municipios más pobres de México, San Agustín recibió otros 50 y tantos millones más, lo que a esa gente pobre de ahí de nada le ha servido: 62 por ciento no cuenta con agua entubada; 77 por ciento vive en casas con piso de tierra; y uno de cada dos nacidos fallece. En tanto el presidente municipal, Jesús Martínez Mendoza, dilapida los recursos en fiestas, pago de políticos en la nómina del Ayuntamiento y campañas políticas fraudulentas. Sus fotografías (de Alfonso Cruz López) divirtiéndose con la modelo Dorismar en “La Papaya” de Huatulco, serán célebres.

Por esta vida disipada, en estado de ebriedad, Jesús Martínez embistió con su lujosa camioneta en Huatulco, hace más de un año, al vehículo de la familia Barete, oriunda de Río Grande, Tututepec, donde varios miembros  de esa familia resultaron heridos y una mujer quedó con secuelas de por vida. Con toda impunidad se negó a hacerse cargo de los daños de los cuales, consta en pruebas, fue plenamente culpable.

Pero la escuela de estos políticos los prepara para esta actuación, uno de sus maestros y padrinos, el ex diputado José Humberto Cruz Ramos, ex presidente de Santa María Huatulco, dejó una estela de corrupción y abusos contra su población, de la que abrevan sus seguidores como Jesús Martínez.

El impune fraude cometido contra habitantes humildes de Bahías de Huatulco, en el sector H3, a quienes  les vendieron lotes de terrenos donados por FONATUR al municipio para la construcción de casas habitación. De las 36 hectáreas donadas se comercializaron indebidamente 11.8, en lo que puede ser el mayor fraude inmobiliario del sexenio de Ulises Ruiz.

El Ayuntamiento de Huatulco puso estas hectáreas en manos de un particular sin costo alguno, esto es, regaló esos terrenos para que el particular los vendiera y obtuviera millones de pesos en una insólita operación donde no realizó inversión alguna. Obviamente es un negocio que no pudo realizar solo. Las cosas se complicaron pues FONATUR, al no cumplirse las cláusulas establecidas en el convenio de donación, finalmente decidió cancelar esa donación.

Empero, más adelante FONATUR de nuevo cedió al actual Ayuntamiento terrenos para la atención de la gran demanda de vivienda, siempre con la condición de que sean entregadas a “desarrolladores de vivienda”, no a cualquiera que se ponga a lotificar y vender terrenos en breña. Pero de acuerdo a las evidencias, es de esta última forma como el Ayuntamiento que dirige Miguel Ángel Olmedo Cárdenas prepara su propio monumental fraude inmobiliario. No por nada es también alumno de José Humberto Cruz Ramos de quien fue secretario municipal cuando aquel fue presidente.

En principio quisieron hacer todo muy formal y lanzaron una licitación pública abierta, la que, por supuesto ganó una empresa fuerte y solvente. Lo anterior no gustó al cabildo y de manera ilegal echó abajo esa licitación para entregar los terrenos a tres empresas, desconocidas hasta entonces y poco solventes: Construcciones Video S.A.de C.V., Inmobiliaria Oxa S.A. de C.V, y Grupo Constructor de Infraestructura S.A. de C.V.

Pronto hará un año de esta nueva arbitrariedad y las mencionadas constructoras no han construido una sola vivienda. Buen alumno, Miguel Ángel Olmedo Cárdenas espera, seguramente, imitar a pie juntillas a su maestro José Humberto Cruz Ramos, para dar rienda suelta al fraude inmobiliario. Exactamente igual que José Humberto cuando dejó la presidencia municipal en pos de la diputación (que recientemente le arrancaron para poner a su suplente).

Olmedo Cárdenas, de ser nominado candidato a diputado local por su distrito, como se menciona, también dejaría la presidencia municipal para irse a la campaña. Como no hay “gallos”, ni aún coalición opositora, tal vez pueda esperarse hasta ahora que gane, pero si los hubiera, estos antecedentes serían un pesado fardo para subir al escaño en San Raymundo Jalpan.

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