Notario 175 de Cuautitlán

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Cuauhtémoc Blas

 

Con un par de apellidos poderosos, Murat e Hinojosa, que le abren las puertas del poder político y empresarial, o empresarial y político, o los dos revueltos que es lo de hoy, ¿para qué habría querido adquirir el joven Alejandro Murat Hinojosa una Notaría Pública?

 

Está visto que para algunos ningún negocio por pequeño que sea es desdeñable, aunque cuenten con enorme fortuna. Pero ahora, con esta acción, les está saliendo más caro el caldo que las albóndigas, como dicen, o el que mucho abarca… se torna impugnable.

 

¿Por qué no fue notario en Oaxaca?

 

En todo caso, si el sueño y la pasión de su vida era la salvación del pueblo de Oaxaca, ¿por qué no vino a conseguirse el motivo de su otra pasión que es sentarse a dar fe pública en una notaría de Oaxaca? ¿Por qué en Cuatitlán Izcalli, si se avecinaba el proceso electoral de Oaxaca?, tierra donde no nació, ni vivió, ni conoce, pero que en su alta vocación de servicio desea gobernar. Ese es el quid del asunto, el peligro de que pudiera llegar a gobernar alguien que no tiene el pulso de la complicada vida del estado de Oaxaca.

 

Una persona activa, emprendedora, con voluntad de poder, no se concibe sentado apaciblemente atrás de un escritorio firmando títulos, documentos, trámites, registros. Hay abogados que comentan que ellos jamás podrían ejercer ese burocrático y aburrido oficio de notario, pues no exige mucho, como sí litigar que impone estudiar e investigar de continuo sobre jurisprudencias y demás avances del derecho.

 

Hasta el poeta chileno, premio nobel de literatura, Pablo Neruda se ocupó de ese oficio en una relación de los que le parecían desagradables, en su poema Walking around: “Sin embargo sería delicioso/ asustar a un notario con un lirio cortado/ o dar muerte a una monja con un golpe de oreja…”

 

Vivir en Edomex para ser notario

 

Para ser Notario en el Estado de México, Murat Hinojosa tuvo que cumplir con la ley del notariado de esa entidad que establece en su artículo 11: Para ser aspirante al nombramiento es necesario obtener constancia otorgada por el gobernador del estado, quien solo podrá otorgarla a quien satisfaga los requisitos siguientes: Fracción II: tener una residencia efectiva e ininterrumpida en el territorio del Estado de México

 

El 13 de septiembre de 2011 se crea la Notaria número 175 del Estado de México con residencia en el municipio de Cuautitlan Izcalli y se nombra al licenciado Alejandro Ismael Murat Notario Provisional de dicha Notaria. El acuerdo es publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado el día 27 de septiembre de 2012. Desde ese día Alejandro Ismael Murat Hinojosa es el Notario Público número 175 en Cuautitlán Izcalli, Estado de México.

 

Para aspirar a gobernar Oaxaca

 

En torno a las exigencias del marco jurídico oaxaqueño para los aspirantes a gobernar la entidad, el artículo 23 de la Constitución de Oaxaca dice textual "son ciudadanos del estado de Oaxaca los hombres y mujeres que hayan nacido en su territorio, quienes sean hijos de padre o madre oaxaqueños y quienes teniendo una residencia mínima de cinco años en la entidad, deseen ser considerados como tales, en los términos de la ley, que sean mayores de 18 años y tengan modo honesto de vivir".

 

Y en el artículo 68 de la misma ley dice: "Para ser gobernadora o gobernador del estado, se requiere: ser mexicana o mexicano por nacimiento y nativa o nativo del estado o vecino con residencia efectiva no menor de cinco años inmediatamente anteriores al día de los comicios”.

 

“Altamente impugnable”

 

No hay duda, la residencia del susodicho es en el Estado de México, no en Oaxaca, por lo que ahora sus asesores están con privilegiar sus derechos humanos a votar y ser votado con base en el Ius sanguinis, derecho de sangre con que se reclama nacido oaxaqueño al ser su padre de Oaxaca. Lo que ha sido minimizado por juristas serios.

 

Aunque parte de su vocación sea la notaría, Alejandro Murat hoy quizá la deteste pues precisamente ella lo tiene prácticamente fuera de la competencia por ser candidato de su partido el PRI a gobernador de Oaxaca.

 

Quienes lo llaman “altamente impugnable” tienen razón, es inminente. Otra debilidad es tener una muy notoria mala marca: es Murat, hijo del ex gobernador con gran desprestigio, marca que se asocia a escándalos, a autoritarismo y corrupción, a Nueva York, a Michigan, etcétera. Cualquier estratega tendría otro reto fenomenal, ¿cómo quitarle esa marca?

 

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