¿Y los presupuestos para prensa?

Imprimir

Cuauhtémoc Blas

 

Anselmo Ortiz García el hoy diputado local coordinador de la bancada del PRD en esta LVII legislatura, quien fue tesorero de la pasada legislatura ostenta un enriquecimiento acelerado desde hace tres años. Una prosperidad evidente en su colección de autos y otras colecciones de donde se confirma que el dinero y el amor no se pueden ocultar.

 

Surgido de pronto en la vida politica de Oaxaca dentro del ámbito de la ex izquierda en donde el PRD destaca con personajes que ni de lejos tienen siquiera aspecto de luchadores sociales Anselmo contrario a los fundadores de los partidos izquierdistas que daban la lucha ideológica en revistas legendarias como El Machete hoy aventureros exitosos como nuestro personaje no tienen para debate ideológico pero si dinero público para pagar la foto de su rostro en portadas de revistas de la high society. Además de publirreportajes en páginas centrales a todo color cual estrella de cine marginal.

 

Para esas frivolidades si dilapidan el dinero público que administran. En cambio ponen el grito en el cielo cuando se les exige que usen de manera efectiva los millonarios recursos públicos presupuestados y justificados para difusión y medios.

 

No es temerario sostener que buena parte de esos enriquecimientos estén también nutridos por esos presupuestos que no se invierten en ellos. Este año son 26 millones los que el Congreso tiene para medios repartidos entre PRI, PAN y PRD.

 

Carentes de una mínima cultura política creen sincera y cándidamente que los dineros públicos que manejan es de su peculio, que es su patrimonio hasta familiar, de ahí que hasta monten en cólera cuando algún medio de comunicación les exige que esos recursos cumplan su cometido.

 

Soberbios y hasta delicados miran por abajo del hombro cual si les quisieran quitar el pan de la boca a sus hijos o sobrinos, cuando tienen la obligación de ejercer esos recursos para lo que fueron presupuestados. Recursos, que quede claro, no son suyos, son del erario.

 

Si estos personajes del PRD que navegan con bandera de izquierda quienes deberían impulsar mayor democracia con la participación y discusión pública en los medios de comunicación para fomentar una educación y conciencia política se debaten en estas decadentes profundidades que se puede esperar de sus jefes del PRI en el Congreso local como Alejandro Avilés quien abiertamente le dijo a algunos de los representantes de los medios que él no concibe que el presupuesto para medios corresponda realmente a éstos. Además de allegarse la asesoría no de especialistas sino de periodistas que llegan a ese cargo con el prurito de abaratar los servicios de difusión tomando como enemigos a quienes en teoría serían sus colegas. Y hay quienes descaradamente presumen que como cantineros (jefes de prensa) se friegan a los borrachos (periodistas) y como borrachos al cantinero.

 

Pero en esta cruzada ni Anselmo ni Avilés están solos, cuentan también con la coordinadora de los diputados panistas Natividad Díaz para escamotear esos recursos que se justifican en los presupuestos bajo el rubro de prensa y medios. Tan apurados también los panistas en hacerse de sólida fortuna personal.

 

Independientemente de la obligación de cumplir con el ejercicio exacto de esos recursos, la realidad nacional y estatal plantean la necesidad de proveer a los medios de recursos para su permanencia sin lo cual podrían desaparecer ante un sociedad de escasa lectura, con el retroceso que implicaría carecer de prensa escrita y de opciones ideológicas o de pensamiento. Esta discusión hemerográfica, esta educación política es fundamental para el desarrollo de la democracia. Sin prensa libre no hay democracia.

 

Esa ha sido la argumentación central de Julio Scherer y la revista Proceso que se ha visto "castigada" por los sucesivos gobiernos de la república. El gobierno de Oaxaca hace lo mismo acá, "castiga"a los medios que lo critican, de lo que también participa alegremente, como estamos viendo, uno de sus poderes, el legislativo.

 

www.revistaenmarcha.com.mx y lc.blas@gmail.com